



En medio de la pandemia por el COVID-19, que además de dejar muerte en todo el mundo está dejando economías destrozadas, sobresale “el camino’’ que tomó Suecia y que en medio de las críticas ha salvado sus trabajos.
Bjorn Lomborg, escritor y economista danés, dijo que los países deben emular las medidas intermedias del gobierno sueco para detener la propagación del coronavirus y –al mismo tiempo– evitar un desastre económico.
‘‘Un bloqueo político a largo plazo, en un intento por detener la propagación del coronavirus, podría hacer más daño que bien, advirtió Lomborg.
“La realidad es que, si sólo queremos detener el coronavirus, tenemos que cerrar la sociedad casi por completo, y a la larga, eso probablemente no sea una solución sostenible’’, enfatizó durante una entrevista a 60 Minutes Australia.
“Cuando cierras las escuelas, cuando cierras los trabajos, en realidad estás creando más daños, más muertes a largo plazo, más desempleo’’, comentó el politólogo.
Suecia permanece abierta para los negocios, con algunas restricciones: trabajar desde casa si es posible, evitar viajes innecesarios, reuniones de más de 50 personas, mientras que los restaurantes, cafés y bares deben espaciar la distancia de los clientes.
Hasta el momento el país nórdico tiene una tasa de 125 contagios por cada 100,000 habitantes, muy bajo en comparación de España e Italia que han estado confinados desde el inicio de la crisis por el coronavirus.